
Dicen que no hay nada como salir fuera para ver como están las cosas realmente. Y nadie que haya pisado Intertabac, la feria de tabaco mas importante de Europa (y probablemente del mundo), habrá vuelto con sensación agridulce. Porque las posibilidades para los detallistas son cada vez mayores, porque hay innovación y porque hay nuevas vías de llegar a unos consumidores cada vez mas conocedores y más exigentes en su demanda.
Con unos 13.000 visitantes y 640 expositores de 57 países, esta edición de InterTabac e InterSupply ha roto varios registros. Y es que lo que en su día fuera una gran feria para los fabricantes de cigarros, ahora es el gran escaparate de los cigarros, de la shisha, del vaping, de la maquinaria y de unas siglas que cada vez van a ser más escuchadas y pronunciadas en su estanco: CBD. Estas siglas, que quieren decir “Cannabidoid” han llegado para quedarse, con una variedad de formatos, sabores y aplicaciones terapéuticas que tras despegar con fuerza en los Estados Unidos llegan a Europa al paso de los dispositivos de vapeo con los que coexisten.
Pero vamos primero con los grandes clásicos de esta feria: los cigarros. Todos los primeros espadas de la fabricación de cigarros Premium de todas las procedencias pasean por los pasillos en loor de multitudes, asediados por los miles de detallistas (e incluso aficionados) que buscan la foto y un rato de agradable charla con los Kelner, Litto Gómez, Nick Perdomo, Abe Flores, Pérez Carrillo, Carlito Fuente y tantos y tantos tabaqueros de renombre.
Los grandes stands de Davidoff, Fifth Avenue (distribuidor de Habanos en Alemania), Villiger o Scandinavian Tobacco Group concentran la actividad rodeados de otros más pequeños pero igual de interesantes rincones como los de Condega, Dos Santos o Vegafina, por citar algunos de ellos.
Productos de nueva generación en los stands de BAT (Vype) e Imperial Tobacco (My Blu) conviven con otras marcas de tabaco, salvo en el caso de IQOS con un stand independiente.
Nada menos que tres pabellones dedicados al vapeo donde encontramos a Juul y a un sinfín de stands que mezclan dispositivos, sabores, recargas y variedades de un sector que tarde o temprano tendrá en España la importancia que sin duda ya tiene en un certamen como éste.
Cada vez mayor presencia de estanqueros españoles, con la particularidad de que muchos de ellos vinieron acompañados por consumidores ávidos de probar lo último de su placer favorito.
En definitiva, que InterTabac es un must al que conviene ir alguna vez en la vida si se quiere innovar y dar un paso más en la excelencia en el servicio.