Desde el 21 de febrero pasado y hasta el 16 de mayo, la Comisión Europea ha estado llevando a cabo una consulta pública sobre el rendimiento del actual marco legislativo para el control del tabaco y sobre las posibilidades de mejorar este marco, una consulta en la que ciudadanos y las partes interesadas han tenido la oportunidad de expresar sus puntos de vista.
Esta consulta pública forma parte de los esfuerzos de la Comisión para reducir el consumo de tabaco en consonancia con el objetivo fijado en el Plan de Acción Europeo contra el Cáncer de crear una generación libre de tabaco en Europa, donde menos del 5% de la población fume tabaco para 2040, a diferencia del 25% que lo hace en la actualidad. El marco legislativo para el control del tabaco objeto de evaluación (incluidas la Directiva 2014 sobre los productos del tabaco, la Directiva 2003 sobre la publicidad del tabaco y otras políticas conexas de control del tabaco en el conjunto la UE) tiene por objeto salvaguardar la salud pública y proteger a los jóvenes de los daños relacionados con el tabaco. Los productos del tabaco y los productos relacionados han cambiado considerablemente en los últimos años, y esto plantea un desafío importante.
En el mercado de la UE han entrado gran variedad de productos emergentes (por ejemplo, productos del tabaco calentado, cigarrillos electrónicos sin nicotina y petacas de nicotina), se han desarrollado nuevos entornos virtuales (tiendas web y servicios de la sociedad de la información como las redes sociales) y han surgido nuevas estrategias de interferencia en la salud pública de las industrias del tabaco y otras industrias afines. La consulta pretende ayudar a determinar las lagunas de conocimiento, detectar nuevas fuentes de pruebas y aumentar la base empírica, recoger datos cualitativos y cuantitativos para apoyar la elaboración de políticas, recoger información sobre los retos, los obstáculos, los promotores y los facilitadores de la aplicación, determinar prácticas basadas en pruebas, evaluar lo que ha funcionado (menos) bien y ver dónde hay margen de mejora y comprender mejor los diferentes puntos de vista, percepción de problemas y argumentos de los distintos grupos de partes interesadas.