Jesús Delgado lleva más de 35 años en el mundo del tabaco. En 1979 entró a formar parte de él y actualmente regenta su propia expendeduría, el estanco El Olivo (Madrid). Hasta el día de hoy, Delgado ha vivido cuatro décadas de cambios intensos e innovación y ha encontrado la manera de adaptarse a la evolución del sector hacia lo tecnológico.
Desde que comenzó a trabajar, Delgado ha sido testigo de cómo su sector se ha transformado de arriba a abajo: ha visto la llegada de nuevos productos al mercado, ha experimentado las dificultades de una legislación cada vez más restrictiva y ha atendido las diferentes tendencias de consumo. A estas alturas, conoce a fondo el funcionamiento de los estancos y sabe de primera mano que la clave para su supervivencia es la adaptación al cambio.
Después de asistir a varias ferias sectoriales, como la Inter-Tabac de Dortmund, Delgado ha encontrado en los dispositivos de vapor un nicho de mercado rentable y una oportunidad para diversificar su negocio. Este estanquero no ha perdido detalle de los movimientos de las grandes compañías y se ha dado cuenta de cómo su estrategia se orienta poco a poco hacia los productos de nuevo desarrollo. Por esa razón se ha subido al carro del vapor en el estanco, convencido de que es ahí donde se encuentra el futuro.
Jesús Delgado se muestra optimista y estima que la nueva TPD 2 beneficiará a los estancos, pues los convertirá en puntos de confianza para la venta de vaporizadores y líquidos
Hasta ahora, Delgado considera que el resultado ha sido bastante bueno. Invertir en vapor le ha dado la posibilidad de atraer a otro tipo de clientes a su establecimiento. Según ha observado, las personas que entran a su estanco en busca de vapor son jóvenes muy bien informados a los que dispensa un trato diferente: dedica un mínimo de quince minutos a cada venta de un cigarrillo electrónico.
Entonces, ¿es el estanco el mejor lugar para vender dispositivos de vapor? Delgado piensa que todavía no. Según dice, “falta espacio y debemos adquirir más conocimiento del producto”. Pero es optimista con respecto a la ley, ya que opina que la entrada de la TPD 2 beneficiará a los estancos, convirtiéndolos en puntos de confianza para la venta de vaporizadores y líquidos. De hecho, es precisamente en los líquidos donde encuentra la máxima rentabilidad del vapor.
La trayectoria profesional de Jesús Delgado conduce a dos conclusiones muy importantes. La primera, que un estanquero siempre debe estar al día en las novedades del sector para asegurar el éxito de su negocio. La segunda, que el vapor es probablemente una vía de acceso al futuro del estanco.