
British American Tobacco (BAT) ha lanzado un estudio de un año de duración para evaluar los efectos en la salud de sustituir los cigarrillos tradicionales por productos de tabaco calentado. Por primera vez, científicos de BAT van a llevar a cabo un estudio controlado, aleatorizado y en distintas clínicas, de un año de duración, para ver qué impacto tiene, en los marcadores de enfermedades asociadas al tabaco, utilizar Glo en lugar de cigarrillos tradicionales. El protocolo del estudio ha sido publicado en el Journal of Internal and Emergency Medicine.
En el estudio participarán fumadores que quieran o no quieran dejar de fumar, así como personas que nunca han fumado. Los fumadores que no deseen dejar de fumar serán elegidos al azar para continuar fumando cigarrillos, o usar solo Glo durante un año, mientras que los fumadores que quieran dejar de fumar recibirán terapia para sustituir la nicotina y / o medicamentos para superar la adicción a la nicotina. Los que nunca han fumado servirán de grupo de control. Los grupos estarán formados por residentes del Reino Unido de 23 a 55 años de edad, que en general gozan de buena salud, y estarán equilibrados por género y edad.
Durante el año de estudio, los participantes continuarán con su vida normal, pero visitarán la clínica cada 30 días para tomar muestras de sangre, orina y otras mediciones fisiológicas, así como completar cuestionarios relacionados con la salud. Se medirán los niveles de marcadores biológicos de las personas que se cree que pueden desarrollar enfermedades relacionadas con el tabaco y se compararán entre los usuarios totales, los fumadores, los que quieren dejar de fumar y los grupos de control.
Para que los datos resultantes sean de verdadera utilidad, es especialmente importante que aquellos participantes que están en el grupo que consumen Glo o en el grupo que quiere dejar de fumar no fumen ningún cigarrillo. Para asegurar y medir el cumplimiento de esta norma, los participantes dispondrán de un diario electrónico donde reportar su actividad. Además, se realizarán análisis de sangre para detectar signos de exposición al humo del cigarrillo. El grupo que utiliza Glo visitará la clínica para obtener nuevos suministros del producto, momento en el que se hará un recuento de los paquetes vacíos, parcialmente usados y los no utilizados.
“Este es el primer estudio a largo plazo de BAT para investigar la exposición y los posibles efectos en la salud asociados al uso de THP durante un período de 12 meses, y nos permitirá observar si se producen cambios favorables y si regresan o no a los niveles observados en los no fumadores”, argumenta George Hardie, Jefe de Investigación Clínica en BAT.
Además, añade que “este estudio cuidadosamente diseñado generará un conjunto de datos a partir del cual la comunidad de salud pública, los reguladores y los consumidores podrán saber si los THP pueden proporcionar una alternativa viable y menos arriesgada al consumo de cigarrillos”.
Finalmente, se espera que los resultados completos del estudio se publiquen en 2020.
Desde British American Tobacco recuerdan que este ensayo se realiza de acuerdo con los principios éticos consensuados derivados de la Declaración de Helsinki, así como con los estándares de calidad de la Buena Práctica Clínica. Además, explican que, como señalan determinados estudios científicos, el aerosol de THP contiene substancialmente menos sustancias químicas tóxicas que el humo del cigarrillo y los estudios clínicos a corto plazo han demostrado que los niveles de biomarcadores de exposición a los tóxicos del humo del cigarrillo en fumadores que cambian a un THP disminuyen rápidamente y son similares a aquellos que abandonan por completo2. Sin embargo, se desconocen los efectos a largo plazo del uso de THP en los niveles de biomarcadores de los consumidores.