La Mesa del Tabaco, en cuyo seno se aglutina el conjunto de la cadena de valor del tabaco en España, considera que el Anteproyecto de Ley del Mercado de Tabacos y Otros Productos Relacionados, supone un aumento desmedido de funciones del Comisionado del Mercado de Tabacos, que centralizará competencias en detrimento de otras instituciones estatales y de las Comunidades Autónomas, aparte de poner en cuestión el buen funcionamiento actual del sistema al tratarse de una nueva norma y no una reforma de la existente.
Según la consulta realizada por LBF a la Mesa del Tabaco, la agrupación que representa al conjunto del sector español del tabaco recuerda que este Anteproyecto supone un nuevo sistema jurídico regulatorio completo del mercado de tabacos y que no es una mera actualización de la ley anterior. “Dado que no hay obligaciones internacionales pendientes de incorporar al sistema jurídico nacional –salvo el sistema específico de infracciones y sanciones en materia de trazabilidad– podría haberse realizado mediante una modificación de la ley actual, sin necesidad de poner en cuestión el buen funcionamiento actual del sistema”, sostiene la Mesa del Tabaco. Águeda García-Agulló, directora general de la Mesa del Tabaco.
«Más de 13.000 estancos, máquinas vending… un sector que en su conjunto apuesta por la innovación–, no se entiende que no se acompañe de un riguroso análisis del impacto económico del mismo”, apuntan desde la Mesa del Tabaco. “También apreciamos defectos en la tramitación –añade la Mesa del Tabaco–, con informes pendientes de organismos que dada la entidad de la norma deberían ser consultados, como la CNMC.
Además, no se ha respetado el procedimiento de información en materia de reglamentaciones técnicas de la Comisión Europea. Como se ha explicado, este Anteproyecto supone una regulación que afecta claramente al Para la Mesa del Tabaco, “en líneas generales, el Anteproyecto supone un aumento desmedido de funciones del Comisionado del Mercado de Tabacos, que centralizará competencias en detrimento de otras instituciones estatales y de las Comunidades Autónomas” y, de ser aprobado en su actual redacción, “implica al mismo tiempo una ampliación del monopolio del comercio minorista de manera discrecional, pues incluye solo a los dispositivos utilizados para el consumo de productos novedosos de tabaco y cigarrillos electrónicos y no a otros elementos como las pipas, papel de fumar y filtros. No existe ninguna legislación internacional que requiera este tipo de medidas sobre los dispositivos para el consumo de productos de tabaco novedosos y no hay ningún país del mundo donde exista esta restricción a su venta, con lo que es difícil entender que en la memoria se mencione que se aplican normas similares de países de nuestro entorno”.
La Mesa del Tabaco explica que la propuesta modifica también las exigencias ligadas a las promociones al consumidor y a las relaciones entre operadores. “Se pasa del actual régimen de comunicación a un régimen de autorización, que constituye un obstáculo a la libre prestación de servicios, uno de los pilares de la Unión Europea. Y se incrementan sustancialmente las sanciones, sin guardar proporción con las conductas tipificadas como infracción, teniendo en cuenta además que la tipificación de las infracciones es bastante imprecisa”. “Dado el enorme alcance de este nuevo sistema normativo y lo amplia que es la cadena de valor en España –43.000 empleos, agricultura, primera transformación, industrias, distribución mayorista, red de funcionamiento completo del mercado, pero paradójicamente se ha notificado como una norma fiscal. Por ello, el plazo ordinario de tres meses para que los interesados puedan enviar sus comentarios se ha reducido a 24 horas. Esta circunstancia en sí misma es contraria al espíritu de la Comisión Europea en este procedimiento, que busca la transparencia y la verificación de las reglamentaciones técnicas en el mercado interior”, concluye.
Para la Mesa del Tabaco, la fase de audiencia pública ha estado abierta durante el mes de junio, el plazo para comentarios finalizó el pasado día 24. “Conforme al alcance de este nuevo sistema que se propone, hubiera sido deseable un plazo mayor”, sostiene. Desde la Mesa del Tabaco “confiamos en que durante la fase de tramitación del Anteproyecto se tengan en cuenta las alegaciones presentadas, se subsanen los defectos de tramitación con los necesarios procedimientos de consulta y con un análisis de impacto riguroso para garantizar que el buen funcionamiento que ha venido demostrando el mercado con la actual normativa se mantiene en el futuro y se acompasa al espíritu innovador del sector”.